lunes, 13 de febrero de 2012
martes, 3 de noviembre de 2009
domingo, 25 de enero de 2009
conceptos ambulantes sobre espacio negativo
si el segundo encuentro es más humano, el tercero explora la ausencia de hombre en el espacio. las peculiares relaciones que se dan entre técnica y naturaleza en los territorios actuales.
presencia de una ausencia
intemperie
terrain vague.
-terreno baldío en español.
-vacante, vacío, libre de actividad, improductivo, obsoleto
-impreciso, indefinido, vago, sin límites determinados, sin futuro
territorio residual
espacio disponible ≠ espacio no disponible
descampado deshabitado. lo no habitado. lo disponible o no.
espacios no habitables en puerto madero, no están a la venta.
espacio a la espera
el asentamiento “rodrigo bueno” como espacio de resistencia al proyecto urbanístico
espacios en obra
terreno que no es ni público ni privado
planes de urbanismo parados, suspendidos.
proyectos que nunca fueron. utopía.
ciudad nonata. prematura
concepto de espacio negativo como un concepto móvil, fugaz, efímero. toda cartografía de territorios negativos sufre cambios a diario.
los descampados actuales van a transformarse. algunos desaparecerán pronto. se aconseja urgencia en la visita, y que esta sea reiterada para constatar las transformaciones que a veces son diarias.
inminencia de desaparición
transformace en custodios, guías y artístas de los territorios negativos o actuales
trabajar con los terrain vague no puede ser simplemente reordenarlos (reciclajes) para que se integren de nuevo en la trama de la ciudad cancelando el valor de su vacío y de su ausencia. por el contrario es este vacío y ausencia lo que debe ser salvado a toda costa.
“el papel del arte es constituirse en fuerza reveladora de la multiplicidad y la contingencia”.
surrealistas: espacios negativos como el subconciente de la ciudad
intersticios y vacíos que no solo están en los márgenes del barrio si no en su corazón mismo.
lugares de memoria y ambigüedad.
el lado negativo de la ciudad construida, áreas intersticiales y de margen, espacios abandonados o en vías de transformación.
el lado oscuro de las ciudades
los espacios de choque y contaminación entre orgánico e inorgánico, naturaleza y artificio.
espacios dislocados, desconectados, borrados, absorbidos, desaparecidos
-
stalker. forma de avance por líneas ocultas y oblicuas. el espacio negativo se construye con las emociones.
“la zona es quizás un sistema muy complejo de pliegues… no sé que sucede aquí en la ausencia del hombre, pero no bien llega alguien todo comienza a moverse… la zona es en cada momento precisamente tal como la hemos creado nosotros, como nuestro estado de ánimo, pero lo que sucede no depende de la zona, depende de nosotros.”
presencia de una ausencia
intemperie
terrain vague.
-terreno baldío en español.
-vacante, vacío, libre de actividad, improductivo, obsoleto
-impreciso, indefinido, vago, sin límites determinados, sin futuro
territorio residual
espacio disponible ≠ espacio no disponible
descampado deshabitado. lo no habitado. lo disponible o no.
espacios no habitables en puerto madero, no están a la venta.
espacio a la espera
el asentamiento “rodrigo bueno” como espacio de resistencia al proyecto urbanístico
espacios en obra
terreno que no es ni público ni privado
planes de urbanismo parados, suspendidos.
proyectos que nunca fueron. utopía.
ciudad nonata. prematura
concepto de espacio negativo como un concepto móvil, fugaz, efímero. toda cartografía de territorios negativos sufre cambios a diario.
los descampados actuales van a transformarse. algunos desaparecerán pronto. se aconseja urgencia en la visita, y que esta sea reiterada para constatar las transformaciones que a veces son diarias.
inminencia de desaparición
transformace en custodios, guías y artístas de los territorios negativos o actuales
trabajar con los terrain vague no puede ser simplemente reordenarlos (reciclajes) para que se integren de nuevo en la trama de la ciudad cancelando el valor de su vacío y de su ausencia. por el contrario es este vacío y ausencia lo que debe ser salvado a toda costa.
“el papel del arte es constituirse en fuerza reveladora de la multiplicidad y la contingencia”.
surrealistas: espacios negativos como el subconciente de la ciudad
intersticios y vacíos que no solo están en los márgenes del barrio si no en su corazón mismo.
lugares de memoria y ambigüedad.
el lado negativo de la ciudad construida, áreas intersticiales y de margen, espacios abandonados o en vías de transformación.
el lado oscuro de las ciudades
los espacios de choque y contaminación entre orgánico e inorgánico, naturaleza y artificio.
espacios dislocados, desconectados, borrados, absorbidos, desaparecidos
-
stalker. forma de avance por líneas ocultas y oblicuas. el espacio negativo se construye con las emociones.
“la zona es quizás un sistema muy complejo de pliegues… no sé que sucede aquí en la ausencia del hombre, pero no bien llega alguien todo comienza a moverse… la zona es en cada momento precisamente tal como la hemos creado nosotros, como nuestro estado de ánimo, pero lo que sucede no depende de la zona, depende de nosotros.”
viernes, 26 de diciembre de 2008
crónica seguimiento/espera
jueves 4 de diciembre entre las 17 y las 19 hs.
luego de una primera aproximación perceptiva, nos sumergimos en la acción de quienes atraviesan el espacio escénico. la trama de los recorridos. nos convertimos en espectadores-cuerpos en movimiento usando los trayectos de los transeúntes como vehículos de deriva. sucede como en “el hombre de la multitud”, detenerse y fijarse en una persona recortándola de la muchedumbre. de repente esa persona ya no forma parte de la multitud, se ha convertido en un individuo, así, de repente. shadowing, ser la sombra de cualquiera, de alguien elegido al azar. un actor que no sabe que está siendo seguido y sin embargo es actor. una dramaturgia sobre la nada. mientras lo sigo lo construyo: con o sin prisa, ocioso, nervioso, alterado, dubitativo, desorientado, abstraído, preocupado, peligroso, perseguido, acechante.
de la calle podría decirse que es ante todo un lugar peregrino, un espacio-movimiento, en el sentido de que es una comarca estructurada por las intranquilidades que registra, que solo puede ser conocida, descrita y analizada teniendo en consideración no tanto su forma como las operaciones prácticas, las capturas momentáneas y las esquematizaciones tempo-espaciales en vivo que procuran sus practicantes. microdesplazamientos, paradas, esperas, posiciones corporales, miradas, las pequeñas turbulencias, etc., dan pie a movimientos concertados que pueden evocar los de un ballet. la calle como escenario de teatralizaciones.
“seguimiento/espera” nombra una actividad que consta de dos momentos.
por un lado “seguimiento”, somos espectadores-participantes, transitadores, que se mueven por el espacio propuesto por el caminante, incorporando el ritmo de sus pasos, ocupando el espacio que deja abierto, circulación, flujo, canales adentro de la corriente, desplazamientos cotidianos y también marginales, extraordinarios. captar el movimiento en tránsito, sus pausas, sus cambios de ritmo, sus oscilaciones, la disposición corporal al traslado, su modulación de las pautas de paso seguro.
por otro lado “espera”, suspensión/detención del recorrido por el ingreso del seguido a un espacio privado o por su salida del espacio escénico de puerto madero o por el fin de un cierto lapso de tiempo. detenerse con el seguido. el fin del seguimiento habilita el momento receptivo, la apertura a la percepción del lugar. pequeños estancamientos sobrevenidos como pausas, como turnos, permiten el registro de las inmediaciones, interacción con el entorno que conforma una unidad tan positiva como instantánea.
las dos horas se hacen cortas, recién cuando comenzábamos a aclimatarnos a la actividad había ya que darla por concluida. interferencia entre los grupos, hay dificultad con los mensajes de texto.
enfoque del espacio, la instancia de registro con las cámaras estenopeicas. una toma única, con una retrotecnología que depende del momento oportuno y no tanto de la habilidad del fotógrafo, escapa a la precisión de una máquina exacta pero por eso mismo permite posibilidades de visión extrañas sobre la trama circulatoria. cada cámara con su nombre y su tiempo de exposición de acuerdo al día y a la intesidad de la luz: jamaica rhum: en día soleado 3 minutos, en dia nublado, 5 min.; sole d´ italia, 2 min 30 en soleado, 4 min 30 en nublado; aprox., etc..
finalmente el armado del mapa bajo un código común de referencias, el registro de una capa de hojaldre urbano. lo urbano como todo lo que en la ciudad no puede detenerse ni cuajar. la versatilidad innumerable de los acontecimientos que recorren una sociabilidad difusa, hilvanamiento de formas mínimas e inconclusas de enlace. la cartografía no pretende reflejar un texto uniforme, sino reponer una variedad de texturas.
de la calle podría decirse que es ante todo un lugar peregrino, un espacio-movimiento, en el sentido de que es una comarca estructurada por las intranquilidades que registra, que solo puede ser conocida, descrita y analizada teniendo en consideración no tanto su forma como las operaciones prácticas, las capturas momentáneas y las esquematizaciones tempo-espaciales en vivo que procuran sus practicantes. microdesplazamientos, paradas, esperas, posiciones corporales, miradas, las pequeñas turbulencias, etc., dan pie a movimientos concertados que pueden evocar los de un ballet. la calle como escenario de teatralizaciones.
“seguimiento/espera” nombra una actividad que consta de dos momentos.
por un lado “seguimiento”, somos espectadores-participantes, transitadores, que se mueven por el espacio propuesto por el caminante, incorporando el ritmo de sus pasos, ocupando el espacio que deja abierto, circulación, flujo, canales adentro de la corriente, desplazamientos cotidianos y también marginales, extraordinarios. captar el movimiento en tránsito, sus pausas, sus cambios de ritmo, sus oscilaciones, la disposición corporal al traslado, su modulación de las pautas de paso seguro.
por otro lado “espera”, suspensión/detención del recorrido por el ingreso del seguido a un espacio privado o por su salida del espacio escénico de puerto madero o por el fin de un cierto lapso de tiempo. detenerse con el seguido. el fin del seguimiento habilita el momento receptivo, la apertura a la percepción del lugar. pequeños estancamientos sobrevenidos como pausas, como turnos, permiten el registro de las inmediaciones, interacción con el entorno que conforma una unidad tan positiva como instantánea.
las dos horas se hacen cortas, recién cuando comenzábamos a aclimatarnos a la actividad había ya que darla por concluida. interferencia entre los grupos, hay dificultad con los mensajes de texto.
enfoque del espacio, la instancia de registro con las cámaras estenopeicas. una toma única, con una retrotecnología que depende del momento oportuno y no tanto de la habilidad del fotógrafo, escapa a la precisión de una máquina exacta pero por eso mismo permite posibilidades de visión extrañas sobre la trama circulatoria. cada cámara con su nombre y su tiempo de exposición de acuerdo al día y a la intesidad de la luz: jamaica rhum: en día soleado 3 minutos, en dia nublado, 5 min.; sole d´ italia, 2 min 30 en soleado, 4 min 30 en nublado; aprox., etc..
finalmente el armado del mapa bajo un código común de referencias, el registro de una capa de hojaldre urbano. lo urbano como todo lo que en la ciudad no puede detenerse ni cuajar. la versatilidad innumerable de los acontecimientos que recorren una sociabilidad difusa, hilvanamiento de formas mínimas e inconclusas de enlace. la cartografía no pretende reflejar un texto uniforme, sino reponer una variedad de texturas.
jueves, 25 de diciembre de 2008
Diciembre 8 - Julieta
Recorrido desde el Parque Lezama a …. Polo petroquímico.
En bicicleta.
Tensión entre el paisaje sonoro y el paisaje visual .
El sonoro se construye con una ciudad apagada. La cumbia quedó atrás, los colectivos también. Las avenidas fueron sólo un par de transversales, ya lejos. Acá hay pajaritos, ventisca en los árboles, alguna radio dentro de un auto. Tranquilidad y día de campo. Falta el campo.
El agua es amarilla. Azufre. El olor es químico. Los objetos conteiners. Camiones estacionados. Carne de pescado. Garita militar, reja y propiedad privada. Torres de ladrillos. Humo de fábrica. Carteles que llaman a mantener limpio. Mugre entre la maleza y la humedad.
Parece ser el lugar elegido para un feriado distendido. Familias hacen picnic al lado del taxi con puertas abiertas. La gente bebe. Padres e hijos pescan a orillas de la catarata ácida. Amarillo. ¿De qué color es este río?
El recorrido y el espacio me atraen, y no puedo concentrarme en ensayar definiciones para el “espacio negativo”. Estoy atraída en esa tensión. Puedo caminar, bajar, cruzar alambres, tantear las velocidades de la bicicleta según las quietudes del entorno. No puedo concepto. Hay espacio para meterse en el espacio. No cierra. No se entiende. Hay grieta. Hay hueco. Hay veladura. Somos el elemento humano…. Será el vacío de los chinos?
Hay un barco gigante estacionado en la tierra. Una inmensa hélice entre los yuyos detrás del alambrado. Una bañadera llena de escombros. Una planta pinchuda se adueñó de una ventana. Un puente que no pasa por arriba de nada. Conecta nada con anda.
Un río que no se utiliza como fuente de agua. Un alambre de púa que se cruza por sus abolladuras. Una playa de estacionamiento sin vehículos.
Tal vez los espacios en negativo tengan que ver con la función que pretenden y la realidad que les opera. Claramente en esa tensión, en ese hiato que se crea, hay espacio. Hay tiempo. Hay por donde meterse.
martes, 23 de diciembre de 2008
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